9 de agosto de 2012

Rafting en el Porma

Una jornada para refrescar los calores y quebraderos de cabeza que uno tiene ya a estas alturas con los preparativos de la organización de la carrera por montaña Villalfeide Polvoreda.


Así que, Apa nos propone una tarde activa y pasada por agua. Las risas están aseguradas y más, cuando sufro en sus carnes el bautismo del Porma. Es la típica novatada que se hace en el primer contacto con el agua. Más que nada, también para saber si el neopreno tiene fisuras o no, jejejeje....


Después de las oportunas indicaciones por nuestro timonel. Nos ponemos en marcha para saciar nuestra sed de rápidos torrentes que aunque no lo parezca los hay y muy disfrutones. 


Destacar la importancia que tiene la buena colocación en la barca para no caer continuamente y obedecer a todas las instrucciones que se da, ya que es vital que la coordinación exista para el buen funcionamiento y disfrute de la actividad.



Varias son las zonas en el transcurso del río, que hacen que uno quiera repetir una y otra vez. Palada tras palada, vives el momento con emoción e incertidumbre de saber que vendrá lo siguiente: saltos, remolinos o rápidos te esperan para envolverte e engullirte hasta el fondo.


Al final es todo tan rápido, que el tramo del río hasta Boñar se hace enormemente corto y refleja en las caras de tus compañeros de travesía una felicidad fuera de toda duda. A pesar de los momentos espeluznantes que se pasa ahí arriba.